Refresco asociados a enfermedades y envejecimiento retardado por vitaminas grupo B
El exceso en el consumo de los componentes de las bebidas gaseosas puede perjudicar distintos órganos del cuerpo: el azúcar incrementa la posibilidad de padecer sobrepeso, obesidad y diabetes mellitus, y favorece el desarrollo de caries..
7Además del alto contenido de fósforo en las bebidas gaseosas minimiza la absorción del calcio en los huesos, lo que predispone la aparición de osteoporosis y el desarrollo de piedras en los riñones (litiasis renal); el sodio puede desencadenar hipertensión arterial, y la cafeína altera el sistema nervioso, ocasionando insomnio.
Los grupos que consumen bebidas gaseosas son cada vez más amplios. Si bien con anterioridad era posible detectar que el consumo de este producto se iniciaba a partir de los cinco o seis años de edad, hoy el 20% de los niños entre uno y dos años de edad ya consumen bebidas gaseosas con regularidad.
A través de la estrategia PREVENIMSS, el Seguro Social orienta a sus derechohabientes sobre cómo llevar a cabo una dieta equilibrada que incluya todos los grupos de alimentos y reduzca sustancialmente el consumo de productos procesados, como los refrescos, además de recomendar hacer ejercicio por lo menos 30 minutos al día.
Por ello, el Instituto Mexicano del Seguro Social realiza una valoración a sus derechohabientes a fin de establecer la mejor forma de alimentación y cuidados en general, como la ingestión de frutas, verduras, cereales, además de pescado y pollo, y así evitar problemas de salud.
Si la población no hace conciencia del daño que ahora se provoca, en poco tiempo las futuras generaciones, que crecen con los hábitos de vida y alimentación que se practican actualmente, presentarán enfermedades mórbidas a edades más tempranas y complicaciones que dañarán muy pronto su salud
TOMAR VITAMINA B1,B6 Y B9 PARA RETARDAR ENVEJECIMIENTO
Aunque es un hallazgo dramático e impactante, aún no recomiendan que personas mayores consuman los suplementos Científicos han revelado el arma más reciente en la batalla contra la enfermedad de Alzheimer: una humilde vitamina.
Investigadores de la Universidad de Oxford han descubierto que tomar tabletas de tres vitaminas B cada día retrasa la contracción del cerebro que ocurre con la edad y causa signos tempranos de demencia, como pérdida de la memoria
En una prueba a dos años, el suplemento vitamínico retrasó la tasa de atrofia cerebral a la mitad en un grupo de personas de edad, que tenían un encogimiento cerebral de más de 30 por ciento.
Los exámenes cognitivos mostraron que quienes tenían menor encogimiento obtuvieron mejores resultados.
Una píldora vitamínica que retrasara la decadencia mental asociada a la edad tendría implicaciones colosales. Alrededor de 1.5 millones de personas en el Reino Unido, 14 millones en Europa y 5 millones en Estados Unidos tienen problemas de memoria, lenguaje u otras funciones mentales, conocidos como discapacidad cognitiva leve (DCL), de los cuales la mitad desarrollan Alzheimer o alguna otra forma de demencia en el curso de cinco años. Incluso un pequeño retraso de este proceso tendría inmensos beneficios humanos y económicos.
Sin embargo, los investigadores advirtieron que es muy pronto para recomendar que personas mayores con lagunas de memoria tomen suplementos de vitamina B, en tanto nuevos estudios no confirmen los beneficios y aquilaten riesgos.En puerta, nuevo estudio
En la prueba se usaron dosis altas, de unas 300 veces la ingesta recomendada de B12 y cuatro veces los niveles recomendados de ácido fólico. Esto significa, indicaron los investigadores, que se usaron como fármaco y no como suplemento nutritivo, por lo cual se requieren mayores pruebas de seguridad. Ahora buscan financiamiento para un nuevo examen.
Las vitaminas B se encuentran en la carne, los granos enteros, las papas y la levadura. Fomentan el crecimiento y la división de las células, refuerzan el sistema inmune y mantienen piel y huesos saludables.
La investigación de Oxford, llevada a cabo en asociación con colegas en Noruega, se realizó con 168 personas con DCL, la mitad de las cuales recibieron dosis diarias de esas tres vitaminas.
Luego de dos años, los escaneos del cerebro mostraron que quienes habían tomado las vitaminas presentaban menor encogimiento cerebral –0.76 por ciento al año– que quienes recibieron un placebo (1.08 por ciento): una diferencia de 31 por ciento. Una cuarta parte de quienes tomaron las vitaminas obtuvieron los mejores resultados, con una reducción de 53 por ciento en la tasa de encogimiento cerebral.
Se sabe que el encogimiento del cerebro ocurre con mayor rapidez en personas con DCL o Alzheimer y que los niveles altos del aminoácido hemocistina están vinculados a un aumento de riesgo de padecer esos trastornos. Los investigadores creen que las vitaminas B disminuyeron la rapidez de la atrofia cerebral al reducir los niveles de homocistina. Las personas que tenían los niveles más altos de este ácido fueron las más beneficiadas.
Si bien la prueba no se diseñó para medir la capacidad de pensar, los investigadores descubrieron que los individuos que tenían las tasas más bajas de encogimiento obtuvieron las marcas más altas en exámenes mentales.
Los hallazgos se publican en la revista PLoS (Public Library of Science, Biblioteca Pública de Ciencia). El profesor David Smith, del departamento de farmacología de la Universidad de Oxford, quien codirigió la prueba, señaló: "Es un resultado muy impactante y dramático. Nuestra esperanza es que este tratamiento simple y seguro retrase el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer en muchas personas con problemas leves de memoria.
Efectos colaterales
Los resultados son sumamente prometedores, pero necesitamos más pruebas para concluir si estas vitaminas B en particular pueden reducir o prevenir el desarrollo del Alzheimer. Yo no recomendaría aún que una personas que comienza a envejecer y se preocupan por pequeñas lagunas de memoria corran a comprar suplementos de vitamina B sin consultar a un médico.
La pregunta clave, puntualizó, es si la DCL es una manifestación temprana del mal de Alzheimer. ¿Se trata de un proceso continuo? ¿Estamos ante una enfermedad que empieza muy pronto y empeora cada vez más? Yo así lo creo.
No se conocen los efectos de largo plazo de tomar altas dosis de vitaminas, y existen ciertos indicios de que una alta ingesta de ácido fólico se puede vincular con cáncer, indicó Smith. Sin embargo, al preguntársele si intentaría el tratamiento vitamínico si se le diagnosticara DCL, respondió: Sí, sin ninguna vacilación. Lo tomaría.
Chris Kennard, presidente de la Junta de Neurociencias y Salud Mental del Consejo de Investigación Médica del Reino Unido, comentó: Esta prueba es un paso adelante en la develación de la compleja neurobiología del envejecimiento y de la decadencia cognitiva.