La comida rápida puede causar enfermedades

La comida rápida puede causar asma, rinoconjuntivitis (ojos irritados y llorosos) y eccema. La alimentación influye en gran medida en el desarrollo de estas condiciones, que van en aumento entre los niños y adolescentes de los países occidentales. El consumo de comida rápida con una frecuencia de varias veces por semana se sospecha como un hábito pernicioso en tanto que aumenta el riesgo de sufrir estas dolencias. Al mismo tiempo, un bajo consumo de fruta fresca se suma al efecto negativo, pues limita el aporte dietético de nutrientes protectores como ciertas vitaminas y antioxidantes. A continuación se explica la relación entre la comida rápida y estos problemas de salud y se proponen ideas caseras para transformar la comida rápida en comida sana.
Los establecimientos de comida raípida han enriquecido su oferta con alternativas menos calóricas, aunque no siempre más saludables.Un plato de ensalada, una hamburguesa vegetariana, un zumo natural, croquetas y una hamburguesa con ración extra de bacon y queso acaparan el mostrador de un establecimiento de comida rápida.
A primera vista el cliente se sorprende de cómo ha cambiado el menú en pocos años -hasta hace poco tiempo no era posible comer vegetales y frutas en estos lugares-. Decidido a comerse una hamburguesa desde que entró por la puerta, se enfrenta a un dilema imprevisto. Lo hace porque trata de controlarse para no caer en la tentación de comer mal. Sin embargo, finalmente elige la hamburguesa con extra de bacon y queso. Éste no es un comportamiento aislado. De acuerdo a los resultados de una nueva investigación estadounidense, la sola presencia de alimentos saludables puede contribuir a que una persona elija precisamente las opciones menos adecuadas. Son las paradojas de la psicología alimentaria.

FEHRCAREM, la Asociación Española de Cadenas de Restauración Moderna, comenzó su andadura en 1996 y agrupa a una veintena de socios. Entre ellos, importantes firmas de comida rápida o 'fast-food', un sector que también ha crecido con rapidez al calor de las nuevas realidades sociales, como la falta de tiempo para cocinar en casa, para hacer la compra o para comer en familia. Su secretario general, Juan Ignacio Díaz, asegura que no hay alimentos buenos ni malos, sino dietas desequilibradas y hábitos sedentarios, y que son estos últimos los principales responsables de los índices de obesidad en España.

FUENTE Lic. Nutrición CECILIA FERRÉ CALDERON.