Limite las grasas saturadas.
Como las que se encuentran en las carnes grasas, en los productos lácteos de leche entera y en la mantequilla. En lugar de eso, coma carne magra o pollo a la parrilla y pescado. Elija leche, yogur y queso descremados o semidescremados. Reemplace la mantequilla o la margarina con aceites saludables, como el aceite de oliva o el de canola. Reemplazar las grasas saturadas con aceites saludables es importante para ayudar a reducir el riesgo de enfermedad cardíaca. Debido a que usted tiene diabetes, su riesgo de enfermedad cardíaca es más alto que el promedio.
